ELLOS OPINAN RD
Por: Dr. Luis A. De León Pérez – Maestro de Biología y Química
SANTO DOMINGO, RD.- Después de la breve visita de la tormenta Beryl, la cual ha producido fuertes aguaceros que, como siempre, han causado estragos en todo el país, quiero reflexionar sobre las enfermedades a las que debemos prestar atención después de una tormenta o aguacero.
Es importante destacar que, de manera inmediata, que después de un aguacero pueden ocurrir graves accidentes, posiblemente causados por el reblandecimiento del suelo debido a la presencia de una gran cantidad de agua, lo cual puede provocar el derrumbe de construcciones (paredes, techos, etc.), postes de luz y cables eléctricos.
Es importante tener mucho cuidado al entrar en contacto con este último, ya que puede causar quemaduras eléctricas e incluso la muerte.
Existe una alta probabilidad de accidentes automovilísticos, ya que se ha demostrado que una calle mojada puede aumentar en un 70 por ciento el riesgo de accidentes automovilísticos.
También debemos tener en cuenta la contaminación del agua que sale de las tuberías debido a la presencia de tuberías viejas y rotas que se contaminan antes de llegar a las casas.
Es importante consumir agua almacenada en la casa durante las tormentas o utilizar algún método de filtración y purificación del agua que se vaya a consumir.
El agua contaminada puede causar enfermedades gastrointestinales y contaminación por agentes infecciosos.
En las redes sociales se han visto videos de niños en diferentes barrios de la capital y algunas provincias aprovechando las inundaciones para nadar y saltar desde edificios.
Sin embargo, esta práctica no es recomendable, ya que están expuestos al agua que cae del cielo pero que también tiene contacto con el sistema de alcantarillado y las cloacas, lo que podría provocar infecciones por bacterias o virus que podrían causar sepsis o dermatitis y poner en riesgo su salud.
Este tipo de práctica no es recomendable en ningún lugar, y mucho menos cerca de áreas inundadas, ya que se sabe que cuando las cañadas se desbordan, tapan las cuevas de animales como ratas, etc., y las personas podrían entrar en contacto con bacterias que estos transmiten, lo que podría provocar una zoonosis como la leptospirosis.
En cuanto a las enfermedades respiratorias, se pueden presentar crisis de broncoespasmo, posiblemente con el asma como agente causal. Cuando llueve, algunos pacientes pueden sufrir una crisis asmática debido a que el polen en el aire se divide en partículas más pequeñas que se inhalan fácilmente.
Esto puede empeorar los síntomas del asma en las personas que ya tienen esta condición, así como causar ataques de asma en personas que nunca habían experimentado uno.
Es importante tener en cuenta estas precauciones y cuidados después de una tormenta o lluvias fuertes para proteger nuestra salud y prevenir enfermedades.
