Las miodesopsias, también conocidas como “moscas volantes” o “floaters” en inglés, son pequeñas manchas, filamentos o formas irregulares que algunas personas ven moviéndose en su campo visual. Estas aparecen cuando las estructuras microscópicas dentro del humor vítreo (una sustancia gelatinosa que llena la parte interna del ojo) proyectan sombras sobre la retina.
Causas
Las miodesopsias son comúnmente causadas por cambios relacionados con la edad en el humor vítreo. Con el tiempo, el humor vítreo puede volverse más líquido y las fibras microscópicas que contiene pueden agruparse y formar pequeñas sombras que se perciben como manchas o figuras. Otras causas pueden incluir:
- Desprendimiento del vítreo posterior: Es cuando el humor vítreo se separa de la retina, lo cual es más frecuente con el envejecimiento.
- Inflamación dentro del ojo: Condiciones como la uveítis pueden causar la aparición de miodesopsias.
- Hemorragias vítreas: La presencia de sangre en el humor vítreo puede generar la percepción de manchas en el campo visual.
- Desgarros o desprendimiento de retina: Aunque menos común, estos pueden producir miodesopsias acompañadas de otros síntomas, como destellos de luz.
Síntomas
Las personas que experimentan miodesopsias suelen describirlas como manchas oscuras, hilos, puntos o formas que parecen moverse al mover los ojos. Suelen ser más notorias cuando se observa una superficie clara, como una pared blanca o el cielo.
Tratamiento
En la mayoría de los casos, las miodesopsias no requieren tratamiento, ya que tienden a volverse menos perceptibles con el tiempo. Sin embargo, si aparecen de forma repentina, aumentan en cantidad o van acompañadas de destellos de luz, es recomendable acudir al oftalmólogo para descartar afecciones más serias, como un desprendimiento de retina.
En casos severos o debilitantes, se pueden considerar tratamientos como:
- Vitrectomía: Una cirugía en la que se elimina parte o la totalidad del humor vítreo.
- Láser (vitreólisis): Se utiliza un láser especializado para descomponer los flotadores grandes.
Aunque las miodesopsias no suelen ser peligrosas, siempre es recomendable hacer un chequeo oftalmológico para asegurarse de que no haya un problema subyacente más serio.