ELLOS OPINAN RD
Por: Ydalina Leticia Rosario Monción
LA CUABA, PEDRO BRAND, RD – Lo que para algunas las autoridades es un «proyecto de valorización», para los residentes de los sectores El Aguacate y La Cuaba es una sentencia de muerte ambiental. En las últimas semanas de 2025, la tensión ha escalado hasta convertirse en una vigilia permanente y protestas masivas que denuncian la amenaza que representa la instalación de una planta de tratamiento de residuos sólidos en una zona de alto valor ecoturístico.
Residentes de La Cuaba protestan contra creación de vertedero
Un paraíso bajo amenaza
El temor de los comunitarios no es infundado. El paraje El Aguacate es el pulmón de la zona, hogar de humedales que dan origen a varios ríos vitales para la región. Los moradores sostienen que, bajo el nombre de «planta de reciclaje» de la empresa Oakhouse, se esconde la realidad de un vertedero que contaminará las aguas subterráneas y el aire de sus familias.
«¡Primero muertos antes que un vertedero!», es el grito que ha resonado en las calles durante las recientes jornadas de encendido de velas y bloqueos de vías. Los vecinos argumentan que la llegada de basura a gran escala expondría a los niños y ancianos a enfermedades respiratorias y de la piel, acabando con la paz de una comunidad que apuesta al desarrollo sostenible y no a la gestión de desechos ajenos.
Terreno que pretenden destinar para la instalación del vertedero en La Cuaba
Conflicto de intereses y falta de confianza
A pesar de que el Ministerio de Medio Ambiente y figuras como el geólogo Osiris de León defienden el proyecto como una solución moderna para eliminar vertederos a cielo abierto como Duquesa, la comunidad se siente traicionada. Recuerdan que en 2021 los permisos fueron denegados y acusan un «cambio de postura» que ignora los derechos constitucionales de los habitantes a un medio ambiente sano.
Incluso con sectores divididos —donde algunos grupos aislados marchan a favor citando la creación de empleos— la gran mayoría de las organizaciones comunitarias y religiosas mantienen el rechazo absoluto. El director municipal de La Cuaba ha solicitado formalmente la intervención del presidente Luis Abinader para frenar lo que consideran un atropello ambiental.
La salud no es negociable
La realidad actual en Pedro Brand es de incertidumbre. Los residentes han advertido que no permitirán el paso de un solo camión de basura. Para los moradores de El Aguacate, el progreso no puede medirse en toneladas de desechos, sino en la preservación de sus recursos naturales y la salud de sus hijos.

La lucha continúa, y la comunidad se declara lista para defender su tierra hasta las últimas consecuencias.








